domingo, 17 de diciembre de 2023

QUE SOY UN VIEJO?

 


Eso dicen.


¡Qué me importa ¡

Mi forma lenta de caminar, lleno de arrugas y canas, acosado por dolores de senectud, ¿qué me dirán?

_Reflexiones de la vida… tal vez.

A veces me critican porque soy imprudente, irreflexivo, impaciente   y mundano.

Que me importa… si he vivido. Si he existido compasivo sin tacha ni enmendadura.

 Que me importa…  haber perdido el ímpetu de mi juventud para afrontar circunstancias adversas.

Que me importa… si he llorado y he reído, he sufrido y gozado en la carrilera de la vida.

Porque he pensado y lo tengo claro que ya cometí los yerros que me hirieron y ya estoy curado.

Si a veces exploto en ira e irreflexión, pero a veces soy un mar lleno de amor, humildad y bondad.

He hecho el curso de la vida y lo sigo haciendo y lo estoy ganando con suma primacía.

Estoy ganándole a la vida porque aún busco la felicidad entre buenos y malévolos recuerdos.

Si vos en medio del dolor y la amargura aun buscas felicidad, entonces no tenés muros para encontrarla.

Porque ya me considero excluido en la competencia por los laureles entre la maldad y la benevolencia.

 He triunfado porque aún a mis largos años sigo buscando esa felicidad que nunca es plena.

Me reprochan….  que coraje… si forman esta sociedad en decadencia y menguado de valores morales.

Me reprochan…   porque me he defendido en el ruedo de la vida de los que gozaron con mi dolor.

Me reprochan… porque no sigo modelos que chocan con mi brioso y seguro temperamento bravío.

Qué me importa, si he vivido. Si he gozado viendo un colibrí sobre un coral encendido.

Felicidad: haber amado con pasión, forjado soluciones para otros, sin un ápice de interés.

Mi fortuna más que logros materiales, ahora yace dormida en el alegre corazón de mis amigos.

Por eso muestro mi pecho seguro, sin miedo al bufo ni al reproche porque estoy tranquilo.

Porque soy feliz en medio de mis años y de lo que ahora tengo, con sudor y sacrificio.

Simplemente he vivido y soy feliz, porque es lo que me llevaré seguro el día que no esté vivo.

Qué me importa, si estoy viejo. Vaaaah


ARTURO MUSKUS VILLALBA.

         Derecho de Autor 

 

 

 

domingo, 10 de diciembre de 2023

SON LAS 4 Y JULIA NO HA LLEGADO.

 

EN LOS ADENTROS DE LAS COMUNAS DE MEDELLIN HAY UNA FORMA DE AMAR.

A pesar de su longevidad él la enamoró y ella tornaba ese amor de amante a padre.
Era su joven mujer soñada, pero su perdido  corazón también tornaba ese amor de amante a hija. Ese enigma los convirtió en amantes imperfectos hasta que él una madrugada resolvió..... mejor compra esta novela,  que a pesar de su género se extractó de una realidad. Te gustará.  
 
PRIMERA EDICION. Disponible en todas las librerías de Colombia 
Ventas y promoción de presentación desde el 23 de febrero de 2024. 

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  1.  

martes, 4 de octubre de 2022

UN HOMENAJE A JOE ARROYO

                               









                        Yo también amo a Nuestro Caribe tropical, mi recordado Joe.

Desde la eternidad sé que escucharás estas humildes y sinceras palabras

y para mí, dejaste un legado inmortal e inalcanzable,

porque tu música es cadenciosa, es sensual, tiene una melodía extraña

que da ganas de sentir la tibiez de la mujer amada al solaz de la pasión

y a un ritmo demoledor que exalta mar azul, arena blanca y gente caribe

simplemente remembranzas melancólicas de amores furtivos.

Desde joven demostraste tu genialidad en la inspiración

Que al madurar se convirtieron en bellas melodías tropicales

Y  que hoy reposan seguras siempre en nuestros corazones,

porque siempre exaltan nuestra costeñidad y cualidad macondiana.

Esas canciones que viajan con furor por el éter tropical  caribe

y Que hoy, toda Colombia y el mundo tararea y lleva en la mente;

Dios, mujer,  navidad, el mar, el amor, bailador, Barranquilla, amerindios

Protesta oportuna   por La esclavitud y la colonia genocida

Exaltaste la deuda impagable de España a nuestros aborígenes

Proclamaste el desastre de la colonia sobre la africanidad

Te inspiraste en La brisa tumbatechos de los eneros de Barranquilla

brisa cálida que viene de lejos con la suavidad de la humedad del mar,

saturada de olores caribes, olor a tabaco y salitre del mar

nos ensenaste a traducir el dialecto de susurro de palmeras,

con la bóveda celeste saturada de mil luceros

esos que te miran en silencio en la tibieza de la noche caribe

esa Noche inspirada con una luna que da el reflejo sobre el mar,

como mostrándote el camino para llegar a ella

y le cuentes tus secretos. Eso vimos en tu canto, Joe

Contigo supimos algo así como el sentir la barbacoa nocturna

en arena caliente y olor a ron con ecos de flauta de millo y llamador .

Nos hablaste de los frustrados y calamitosos amores pasados,

que como fantasmas desfilan sobre el mar una a uno.

Esa es mi tierra, esa es la región Caribe de Colombia.

Todo eso lo convertiste en música para oír y ver

Joe, donde estés, quiero que sepas que te recordamos siempre

y en tu tumba donde descansas con excelsa paz

nuestros agradecimiento y reconocimiento de tu obra,

porque la historia de esta tierra noble te mencionará siempre,

al ritmo de tambores y olor a aguardiente. Así sea

 

 

 


 


sábado, 3 de septiembre de 2022

LA MULATONA Y MI BARRANQUILLA DE RECUERDOS. POESÍA EN PROSA.

 


El gran Jairo Paba de Barranquilla (para mí, el mejor locutor de cabina de Colombia), hacía sonar la canción de Primitivo Santos a cada rato "La Mulatona" en mi Barranquilla amada. Recuerdo aquel día, yendo para mi casa en un bus urbano de Coochofal en el año 1988, después de una ardua jornada laboral y el gran Jairo, "El líder", lo hizo sonar en el interior de ese destartalado bus de madera y latón y que transitaba lento por las calles arenosas repleto de gente paciente, alegre y laboriosa. Todos los conductores lo sintonizaban siempre, además por su excelente programa salsero "viernes para recordar". Me gustó esta canción desde ese singular día. Tanto así, que me quedé en una tienda cantina cerca a mi casa donde la gallada del barrio se reunía y lo hice sonar varias veces. Esa tarde llovió y esa Barranquilla romántica, alegre y bulliciosa en medio del matiz multicolor de las gotas de lluvia, en ese ambiente tropical de mi arenosa tiñó mi alma para siempre: el amor a la vida, el clamor de la poesía en la salsa, la guaracha y nuestro vallenato. En esa Barranquilla jacarandosa y rumbera, de cerveza fría vestida de novia amada, de luceros rutilantes y susurro palmeras, que se estremecen por la brisa del mar, esa misma que llega a esta hermosa ciudad después de saludar el majestuoso Magdalena, turbulento en su agonía y que se resiste a morir en el inmenso océano con frenesí, ahí está definido lo que esta ciudad representa a los que la amamos. Esa Barranquilla de mujeres bellas y agraciadas, que al caminar van dejando sus feromonas en el aire, qué, como mariposas amarillas revolotean a sus pasos y que exaltan la libido en cualquier varón desprevenido. La Barranquilla de cigarras en abril, con su estropicio desde las lluvias de oro encendidas y las acacias florecidas en el crepúsculo naranja y rojo de hermosos arreboles sobre mi ciudad, que simplemente anuncian una nueva primavera que solo palpan los románticos ya en extinción. Tal vez sea yo el último romántico que queda en el planeta, por eso me llevaré los recuerdos de mi mejor momento en la vida, de juventud, de goce de lo más bello, con una vida expresada en amistad y sentimiento, de amores pasajeros en mis años nuevos, que van llegando y pasando como las nubes blancas que contrastan con ese cielo azul de abril en esta bella ciudad de mis amores. Esa es mi nostalgia que me dice que simplemente ... he vivido. Y eso es precisamente lo que me llevaré a la tumba: "haber vivido una vida placentera en mi Curramba". Porque mi único testamento es que mis cenizas caigan, como lágrimas de madre a esa tierra hermosa, que me vio nacer y crecer, seguro así viviré para siempre, pues a la eternidad me llevaré ese terruño amado llamado "Barranquilla", regalo del Señor. Así será. Esta es otra ofrenda mía a mi ciudad, sincera, humilde y en silencio. Gracias por leer estas palabras extraídas del alma.

 

viernes, 15 de julio de 2022

GOLONDRINAS CREPUSCULARES

 

Amiga: En el triste ocaso de este pueblo triste estoy mirando al cielo.

Mi soledad y mi melancolía es el mundo de hoy.

Observo los arreboles de llamas vivas que amenazan el calmoso pueblo,

la vieja torre de la iglesia manchada por el tiempo,

peregrinada por las últimas golondrinas que buscan su refugio,

El viejo parque de sillas desvencijadas asaltadas por las sombras del crepúsculo

y el frio de la noche que penetra mis carnes

y mi cuerpo se estremece en cada instante con tu recuerdo.

No es justo, Pusiste fin a tu vida, pero también a la mía,

mientras devoraba con presteza el camino hacia ti,

decidido a hablarte de mi amor.

Pero no esperaste mi intento de decirte cuanto te amaba,

tal vez no tuve el valor de merecerte.

No pude separarte a aquel infame que te engañaba.

Aun así, suplicabas y esperabas un puñado de ese amor.

Aunque no condeno tu triste decisión,

soy el culpable de nunca haberte hecho mía.

Y ahora ya no estás y no pude probar el carmín de tus labios.

 

Los lirios morados de tu tumba me lo han dicho,

regados por mis lágrimas vivas en mi dolor,

mientas huelo el perfume de los jazmines a los lejos,

pienso que no tuve el coraje de decirte que te amaba

y ahora ya no estás y sólo tengo tu recuerdo.

Tu recuerdo que me tortura y a veces me calma.

Sé que en la otra vida me encontraré contigo.

Pues la muerte no es obstáculo para seguirte amando,

porque te pienso amar hasta el final de los tiempos,

como vuelven las golondrinas en cada tarde

 volveré a ti después de la muerte.

 

ARTURO MUSKUS VILLABA


sábado, 21 de mayo de 2022

LA NINFA DEL VIEJO MUELLE (CUENTA LA LEYENDA)





Cuenta la leyenda que en noches oscuras de Puerto Colombia 

Aparecía una ninfa de tez morena en el viejo  muelle,

aquella que con su sensualidad de hembra deseada 

embelesaba a marineros y viajeros sobre las blancas olas.

Enamoraba tambien a despechados por amores furtivos imposibles 

que una vez de salir ebrios de las cantinas del pueblo, 

entre los candiles de faroles y mechones en calles oscuras y solitarias,

llegaban al viejo muelle, testigo mudo de promesas incumplidas 

que generaban locura total por mal de amor en esperas eternas.


Con ojos esperanzadores y en cada tarde al apagarse el sol en el mar,

oteaban desconocidas gentes  en busca de su amada perdida   

o mujeres ilusas víctimas de amores de marineros 

en la espera loca de saciar la sed del desengaño y la locura,

entre estibadores, amarres, grúas y ruidos de máquinas al sol ardiente 

y en cada vapor que atracaba a ese puerto de mil amores.  



Sí...  Derramaban sus lágrimas de hombre enamorado  al inmenso oceano,

en la punta del majestuoso muelle, al sumbido de la pícara brisa:

Marineros y viajeros, ilusos por amores calamitosos e imposibles

en medio del inmenso estropicio del reventarse violentamente las olas, 

veian la imagen de esa musa del mar entre algas y pilotes. 


dicen que ella es Ana Torrijos, la que murió de amor esperando una promesa,

la que un día se lanzó al mar llena de decepción y tristeza,

por un vaporino frances de excelsa figura y gestos  de galán,

ese que rompió su inocencia, su linaje de bien y sus sueños de mujer. 


Es ella... dice el pueblo. La han visto desnuda en  las verdes rocas, 

salpicada por las olas,con rostro brillante y cuerpo deslumbrante.

lleva un velo negro en su cabello, dejando ver su mirada tentadora,

ese velo  representa su rechazo a la vida y su odio al viviente.  


En noches sin luna ahí está el muelle y está ella acechando a sus víctimas,

con los pilotes saturados de verdín en esa mole de concreto.

Hombres atrapados por su belleza y sus súplicas de amor,

que en redes de algas trenzadas eran conducidos silenciosos

 al fondo del mar donde ella se saciaba de amor y sexo,

luego los liberaba y el cadaver salía a flote en la oscuridad del mar

y era arrastrado por la corriente hasta que un trasnochador  pescador 

lo divisaba seguramente más allá de Cerro Hermoso 

y avisaba a las autoridades la existencia de una nueva víctima. 

 

Arturo Muskus Villalba